jueves, 22 de enero de 2015

UN PRESIDENTE EN APUROS



Durante la Guerra de Sucesión (1861-1865) el entonces presidente de los Estados Unidos de América, Abraham Lincoln fue detenido por una patrulla nocturna de su propio ejército mientras estaba supervisando el frente de batalla. El motivo, olvidarse del santo y seña establecido. Lincoln les preguntó a los guardias si no sabían quién era, y uno de ellos le respondió: “La verdad es que su cara me recuerda a un sello de correos usado”.