Un día el
multimillonario norteamericano John Pierpont Morgan (1837 – 1913) se acercó al bar donde
habitualmente solía acudir y pidió un whisky de malta. Cuando el barman se lo
sirvió miró a los concurrentes y grito: “Cuando Morgan bebe, todo el mundo
bebe”. Aprovechando esta oportunidad única todos los que estaban allí corrieron
a la barra pidiendo las bebidas más caras. Rápidamente se corrió la noticia por
la ciudad de que el ricachón Morgan invitaba a todos a barra libre, provocando,
claro está, que éste se llenara hasta la bandera. Hasta se dice que hubo tortas
para poder entrar. Pero mientras se desarrollaba la fiesta, el mismo JP Morgan,
tras depositar una moneda en el mostrador,
volvió a levantar la voz y dijo: “Si Morgan paga, todo el mundo paga”.
Aquello cayó sobre los bebedores como un jarro de agua fría, y al igual que se
había llenado el bar en un momento, éste se vació en una auténtica estampida. Algunos
incluso saltaron por las ventanas.
Y por cierto,
como curiosidad, decirles que el personajillo que aparece en la caja del
popular juego de mesa Monopoly, está
inspirado en la figura del tacaño JP. Morgan.