En pleno siglo
del Oro, durante el siglo de Oro, se puso de moda la figura del famoso abogado
y erudito romano Quinto Séptimo Florente Tertuliano quien era un gran defensor
del cristianismo utilizando su gran facilidad con la pluma tanto en sus
discursos como en sus libros. Así pues el tema preferido de las personas, léase
nobles y aristócratas, que se reunían en los salones eran las excelencias de
este literato. Es por ello que a los que acudían a estos lugares durante el
reinado de Felipe IV se les conociera como tertulianos y a estos sitios tertulias.