BREVE HISTORIA DE LOS MEDICI
Eladio Romero
Editorial Nowtilus
A mediados del
siglo XV, el mundo comenzó a despertar. La larga noche medieval parecía que iba
a acabar y que un alba luminoso pronto iba a llegar. Si la caída del imperio romano
fue el estallido que finalizó el mundo antiguo, la caída de otro imperio, el
Bizantino en este caso (Constantinopla, 1453) iba a llamar de nuevo a aquella
edad que ya se creía perdida. Es el Renacimiento, y ya Dios no es el centro del
Universo, sino que es el propio hombre quien se convierte en la medida de todas
las cosas. Vuelven a desempolvarse la sabiduría antigua y el comercio vuelve a
fluir fuerte y poderoso por toda Europa. Todos los nuevos avances económicos y
culturales iban a estar representados en un lugar al que muchos ya comenzaron a
ponerle el título de la Nueva Atenas: la ciudad de Florencia. Y es precisamente
en aquel mundo toscano donde surgió una familia que con el paso de los años iba
a convertirse en legendaria: Los Medici. Su historia es apasionante porque en
su devenir podemos estudiar no solo el Renacimiento en su totalidad, sino
incluso parte de la Historia Europea en la Edad Moderna. Y es por ello por lo que nos alegramos de
contar en estos momentos con la obra Breve
Historia de los Medici, escrito por Eladio Romero y publicado por la
editorial Nowtilus, ya que gracias a ella descubriremos la increíble gesta de
una familia que supo asombrar a todo el orbe conocido.
Venidos desde
los más profundo de la Edad media, los Medici comenzaron a despuntar en
Florencia a mediados del siglo XV, pasando de tener un simple banco tras una
tienda de lanas, a conceder crédito a nobles y papas. El gran artífice de este
cambio fue Cosme de Medici y su padre quienes supieron ver mejor que nadie (y
también tener más suerte que otros) las ventajas que tenía conceder dinero a
los poderosos. Tras fijar sus reales entre las familias más poderosos de
Florencia, y disputarle la supremacía a los Albicci, pensaron que debían
agrandar la gloria de su familia apadrinado a cuantos artistas les demostraran
su valía. Gracias a este mecenazgo Brunelleschi pudo culminar la cúpula de la
Catedral de Florencia, y Donatello asombrar a sus conciudadanos con unas
esculturas a las que solamente les faltaba hablar. Florencia volvía al pasado áureo,
y tanta fue su fama que Cosme no dudó en crear una Exposición del Mundo Clásico
a la que fueron invitados los mayores y mejores artistas del momento. Cosme era
tan querido entre los suyo que a su muerte no dudaron en concederle el título
de Padre la Nación.(Continua)
Parecía que tras
la muerte de Cosme (o Cosimo) muchos creyeron que los Medici iban a bajar de
categoría en el ranking patricio, pero la llegada a la jefatura del gran Lorenzo
el Magnificó iba a redoblar la fama
de esta familia. Supo desde el principio que el arte no solo era una cuestión estética
sino un arma poderosa, y por ello no dudo en revolucionar el arte contratando a
tres grandes titanes en ese campo: Miguel Ángel, Botticelli y Leonardo Da
Vinci. Pero con Lorenzo de Medici no todo fueron alegrías pues ese incremento
de poder hizo que muchas familias rivales también incrementaran el odio hacia
ellos. Un ejemplo de ello lo vemos en la famosa Conjura de los Pazzi en la que
no solo fue asesinado su hermano sino que incluso estuvo a punto de perder la
vida. La venganza fue terrible, y aunque pareciera que todo estaba tranquilo
Lorenzo tuvo que enfrentarse a dos enemigos terribles, el exilio y la fuerza
corruptora de un oscuro monje llamado Savonarola, el cual llegó tristemente a
dominar la ciudad acabando con el Edén artístico promovido por los Medici. El
ocaso se produjo entre las llamas de odio creadas por las Hogueras de las
Vanidades.
Tras esta
desgracia pasaron los años, y en 1512, un exiliado perteneciente a la familia
Medici llamado Juan de Medici, es promovido cardenal. Con fuerzas renovadas
recupera Florencia y vuelve a instalar a la familia en la ciudad. Al año
siguiente, en 1513, muere el Papa y por primera vez un Medici se convierte en
el Vicario de Cristo en la Tierra: León X. Pero a diferencia de las preclaras
mentes anteriores a él, este nuevo Papa no para de derrochar el dinero a manos
llenas gracias al mercado de indulgencias papales. Lutero aparece en escena y
al ver aquel lupanar en que se ha convertido el Vaticano promueve, mediante La
Reforma, la pureza de la iglesia. Un cisma de proporciones inimaginables sacude
el mundo cristiano. A la muerte de éste le seguirá un nuevo Papa Clemente VII,
el cual asistirá impotente al famoso Saco de Roma de 1527. Otro papa Medici
será León XI
Los Medici, según
vemos ya no son en estos momentos una gran familia de una rica ciudad italiana,
Florencia, sino que se ha sabido auparse al poder en todos los rincones del
mundo moderno. Incluso serán allegados de fastuosos tronos, como el francés,
representado en la figura de Catalina de Medici. En el XVII seguirán apoyando a
los grandes artistas y científicos, como Galileo Galilei, y tampoco dejaran de
ser grandes hacendados en otros países europeos. Se convertirán en duques de un
pequeño reino en Italia, pero ya el siglo XVIII será el último siglo en que los
Medici tendrán el poder. Éste culminará en el último duque de la dinastía, Gian
Gastone, en 1737. Aun así, a pesar de estar tres siglos dominando el mundo con
astucia e inteligencia hemos de constatar que su legado no se ha perdido. Su
leyenda ha creado una literatura inmensa en donde las figuras de Leonardo o los
Papas Medici han creado un halo de inmortalidad a esta familia muy difícil de
hallar en otras de la Historia. Así pues les animo a que rememoran la historia
de los Medici y se dejen asombrar por los logros y míticas hazañas que consiguieron en un mundo que principiaba a
despertar. ¡Buena lectura!