Cuando el 7 de Diciembre
de 1941 los aviones japoneses destruyeron la base naval de Pearl Harbor (Hawái)
los americanos despertaron bruscamente a
la realidad y se dieron cuenta de que el mundo estaba en guerra. Miles y miles
de jóvenes soldados fueron al frente, ya sea al continente europeo a luchar
contra los alemanes o bien a las recónditas islas del Pacífico a combatir al
Imperio japonés. Todos querían poner su granito de arena para apoyar la causa y
el mundo del cine no iba a ser menos. El 3 de Octubre de 1942 Bette Davis, John
Garfield, Cary Grant y el compositor Jule Styne inauguraron en la antigua
barraca de Old Hollywood, situada en
el 1451 de la calle Cahuenga, la famosa Cantina
de Hollywood. La misión principal de este lugar era apoyar y animar a los
cientos de jóvenes que iban a dejar su vida en el frente. Allí se podían beber bebidas
no alcohólicas, tomar algún trozo de tarta de manzana, y bailar al ritmo de dos
bandas de música, mientras un actor famoso subido al escenario contaba chistes
al más puro estilo del Club de la Comedia. Todo el mundo quería ir a ver el espectáculo,
pues ¿quién se podía resistir a la tentación de ver a Buster Keaton sirviendo bebidas,
jugar a las cartas con Sinatra, Errol Flynn, o John Wayne, bailar al ritmo de
las Hermanas Andrews, a la par que los ojos se podían extasiar con las bellezas
del local como Ava Gadner, Marlene Dietrich e incluso Verónica Lake? A los
actores no les importaba relacionarse con los soldados y estar con ellos hasta
altas horas de la noche, ya que preferían que olvidaran sus penas durante un
buen rato hasta el día siguiente y, de esta manera, tener un buen recuerdo
cuando estuvieran viviendo un infierno en una trinchera perdida a miles de kilómetros
de distancia de sus hogares.
La Cantina de
Hollywood estuvo abierta durante toda la Segunda Guerra Mundial y era tan
famosa que en 1944 incluso hicieron una película de ella titulada The Hollywood Canteen en donde aparecían
no solo actores de verdad sino también soldados filmados in situ. En Noviembre
de 1945 La Cantina cerró sus puertas tras haber hecho su trabajo. En total
acudieron alrededor de 3 millones de soldados ya fueran americanos como británicos,
australianos y por increíble que parezca hasta los rusos echaron unas
carcajadas con los actores. Años después la actriz Bettes Davis fue premiada
por el Departamento de Defensa de Estados Unidos por su esfuerzo en guerra.