Desgraciadamente
también fueron muchas las mujeres que fueron victimas de la guillotina durante
la Revolución Francesa. Una de ellas se llamaba Madame Roland (1754-1793) y era
un miembro destacado de la facción girondina. No solo iba a sus reuniones sino
que también difundía sus ideas a través de los periódicos como por ejemplo El correo de Lyon. Pero sus ideas
contrarias al régimen de Terror la llevaron a que un día fuera arrestada y sentenciada a muerte. Se dice que
después de sufrir un ultrajante paseo en carreta, miró a la multitud que se
apretujaba para ver la ejecución y sin que el miedo traicionase su ánimo
exclamó: “Libertad, libertad… ¡Cuántos crímenes
se comenten en tu nombre!”.