A lo largo de
los siglos ha sido habitual la rivalidad entre artistas, lo que pasa es que
ahora se solventa a través de las redes sociales y en la antigüedad, por
ejemplo, a falta de esos medios se resolvían mediante duelos artísticos. En Atenas,
en el siglo V a.C, existía una polémica acerca de cuál de los pintores, Zeuxis
de Heraclea o Parrasio de Éfeso, era el mejor. Cuando se encontraban por el
agora no hacían más que insultarse y dirigirse palabras gruesas y lo mismo
pasaba cuando sus seguidores se topaban por casualidad en alguna callejuela.
Incluso llegaban a las manos. La ciudad estaba divida en dos facciones por lo que se pensó que lo mejor era
dilucidar esta disputa a través de un juicio. El día convenido Zeuxis presentó
una tabla en la que había pintado unas uvas tan bellas que todo el mundo pensó que iba a ser el ganador.
Cuando le tocó el turno a su rival, Zeuxis se dio cuenta de que éste no había
descorrido la tela que cubría su cuadro, así que él mismo decidió retirarla.
Pero cuando lo intentó observó que la tela estaba pintada, y tanto le gustó que
le otorgó la victoria a Parrasio por haber mostrado a todos un trampantojo tan
maravilloso.