Ya solo los
números nos hacen ver la increíble gesta que fue aquel tiempo llamado
Reconquista. Por ejemplo, los romanos estuvieron en Hispania alrededor de seis
siglos. La conquista de América hasta la independencia de aquel continente duró
tres siglos y medio. Más o menos. Pero si establecemos que los musulmanes
comenzaron la conquista de Hispania en el 711 cuando la avanzadilla ismaelita de
Tariq llegó a la Península Ibérica, hasta que el último reino, en este caso el
de Granada, cayó en manos de los cristianos en 1492, nos sale un total de 781
años. ¡Casi ocho siglos de dominación musulmana! Como se puede ver la
importancia de la influencia ejercida por los árabes en la Península, y el
subsiguiente proceso de reconquista, es máxima. Durante todo ese tiempo, a
pesar de la convivencia, ambos bandos, cristianos y musulmanes vivieron en
continua guerra, con la espada en la mano y un rezo en los labios. Son grandes
las batallas que se produjeron en todos esos siglos, de buen signo para unos o
de tristeza para otros, pero todas ellas de suma importancia para los libros de
Historia y el futuro destino de España. Así pues les invito a recorrer esos 800
años de lucha a través del libro Breve
Historia de la Reconquista, escrito por José Ignacio de la Torre y editado
por Nowtilus (2018).
Después de la
conquista del norte de África los ejércitos árabes tenían puestos sus ojos en
el reino visigodo de Hispania. Pero atravesar el estrecho y dominar ese reino
no hubiera sido posible sin que hubiera problemas internos en aquellos tiempos.
Los nobles estaban divididos tras la elección del rey Rodrigo como jefe supremo
de los godos por lo que estableciendo una serie de alianzas con el bando
opositor y aprovechando el descontento de varios sectores de la población,
consiguieron atravesar el estrecho en el 711 y derrotar a las fuerzas godas en
la Batalla de Guadalete. La suerte de su rey y de toda Hispania estaba echada
ya que en pocos años, en concreto en el 725, los musulmanes ya habían ocupado
casi toda la Península. Solo la derrota de Poitiers en el 732 pudo frenar sus
ansias conquistadoras. Pero los árabes habían cometido un grave error y es que
dejaron que un grupo de cristianos rebeldes, la mayoría huidos del naufragio
visigodo, se hicieran fuertes en el Norte del reino, en Asturias. Fue entonces,
de la mano de un spatario llamado
Pelayo, cuando comenzó el proceso de Reconquista.
Los reinos
cristianos comenzaron a crecer desde el núcleo astur y solo la fuerza del
califato musulmán contenía las fuerzas cristianas. Desde el siglo VIII hasta el
X éstos llegan hasta el Duero, configurando una Tierra de Nadie en las que
ambos bandos se respetaban creando a la vez la figura de hombres de la frontera
quienes tenían una mano en el azadón y otra en la espada. Pero con la caída del
régimen califal y la implantación de los reinos taifas los vientos de guerra
comienzan a cambiar a favor de los cristianos. La desunión musulmana, aunque intentó ser frenada dejando
paso a los almorávides y almohades a Hispania, propició que los reinos del Sur
fueran cayendo uno tras otro. Nada podía ya frenar la expansión de las fuerzas
cristianas que curiosamente podían haber culminado este proceso de Reconquista
en el siglo XIII pero ésta se estanco y durante algunos siglos fue alargada a
base de pactos hasta que en 1469 se reactivo de nuevo. Los Reyes Católicos
habían puesto sus ojos en el reino de Granada, último bastión musulmán, y no
pararían de luchar hasta que la bandera con la cruz de Cristo ondeara en lo
alto de la Alhambra. Hecho que ocurrió en 1492. La Reconquista había terminado.
Breve Historia de la Reconquista nos
habla de este proceso y nos lleva de la mano a conocer las grandes batallas de
la época, los reyes y califas que hubo y que muchas veces entraron en la
leyenda, y las guerras intestinas que existían entre reinos y las aventuras y
desventuras de los soldados que dejaban sus vidas por uno u otro credo.
Vibraremos con el entrechocar de aceros en las Navas de Tolosa y observaremos
atónitos a la caída de Granada. Conoceremos las gestas del Cid o de Almanzor,
las maravillas de la Córdoba de los Abderramanes, y las intrigas políticas de
los reinos del Norte de Hispania. Nos encontramos por tanto con un trabajo de síntesis
muy cercano a las personas que quieran adentrarse en esta época, y todo ello escrito
de manera didáctica a la vez que rigurosa.