En primer lugar hay
que aclarar que si los ingleses, además de otros países, conducen por la
izquierda no es por simple capricho sino por una costumbre que se remonta a la
Edad Media. En aquellos años era norma general que los caballeros montaran a sus corceles por el lado izquierdo ya que de
esta manera tenían libre la mano derecha para desenfundar rápidamente la espada
en caso de lucha. Otro motivo se debe a la conducción de carruajes y al respeto
que se debe a los viandantes. Los conductores tenían la costumbre de agarrar
las riendas con la mano izquierda mientras que con la derecha sostenían el
látigo. Y si no, imagínense que pasaría si el carruaje fuera por el lado derecho
y al conductor le diera por utilizar la fusta con la misma mano … ¡más de un
peatón se llevaría un latigazo sin querer! Cuando llegó la Revolución Francesa,
Napoleón, a quien le gustaba legislar
sobre muchas cosas, estableció mediante un edicto (1794) que se debía conducir
por la derecha. Edicto al que los ingleses, como se puede ver, no le hicieron
mucho caso.