Más grande que la
conquista en la batalla de mil veces mil hombres es la conquista de uno mismo.
Oriente. Tan
lejano, tan misterio, pero bello en su esencia interna. Desde nuestro punto de
vista euro céntrico desconocemos gran parte de las maravillas de aquel inmenso
continente. Sabemos de él meros clichés
superficiales pero desconocemos en verdad cual es la esencia que recorre su
forma de ser. Una de éstas es el budismo (término acuñado en Occidente en el
siglo XIX) De éste creemos que es una especie de religión, que consiste
solamente en meditar y no comer carne. Repito, una religión… cuando el propio
creador de este pensamiento, Sidarta Gautama, Buda, nunca quiso ser idolatrado sino mostrar al
mundo una especie de filosofía que condujera a la Iluminación, pues éso es el
budismo (en minúsculas, pues Buda en mayúscula es el personaje histórico) un medio
para alejar mediante la meditación las falsas apariencias y dolores terrenales.
El budismo se practica en toda Asia desde la India, de donde surgió, hasta el mismísimo
Japón, pasando por China, Sri Lanka… Así pues les invito a que conozcan la
historia de este pensamiento a través de la obra Breve Historia del Budismo, escrito por Ernest Yassine Bendriss,
que les permitirá adentrarse no solamente en la vida y obra de Buda sino en un
mundo donde la leyenda y la realidad muchas veces se confunden de manera
magistral.
Podríamos
dividir el libro en dos partes claras, aunque complementarias. Por un lado el
autor nos ofrece la vida y obras de Sidarta Gautama, Buda, el cual es un
personaje difícil de encuadrar ya que vivió a caballo entres los siglos V y IV
a. C. De rica cuna, muy pronto se dio cuenta de la futilidad de la vida y tras
dejar el oro y la belleza del reino de Shakya, se convirtió en asceta para depurar
su cuerpo. Pero pronto comprendió que aquel no era el camino… lo único que
podía llevar a despertar su nirvana, no era la mortificación corporal, sino la
meditación y comprensión de sí mismo. Y lo consiguió. Pasado un tiempo reunió a
sus discípulos en Benarés donde difundió sus principios básicos: Las Cuatro
Nobles Verdades. Tan grande fue que incluso dice le leyenda que a su muerte fue
enterrado entre sedas y algodones. Después de la conmoción sufrida el
movimiento budista fue creciendo a lo largo y ancho de Asia por lo que se hizo
necesario que se fijaran unas reglas básicas en distintos concilios , como por
ejemplo el tercero auspiciado por el emperador Asoka el cual era proclive a
difundir las ideas de Buda. Y así fue pues pronto muchos territorios conocieron
las Cuatro Nobles Verdades, como Ceilán, China, el Tíbet, Vietnam, Corea, Japón…
Ernest Yassine
Bendriss, por otro lado, nos deleita hablándonos sobre cómo se configuró el
budismo a lo largo de distintos siglos y de distintos territorios, cuáles eran
las reglas monásticas, los sistemas de meditación, las ramas del Zen, o las
distintas corrientes existentes como el Hinayana, el Mahayana, o el Vajrayana.
A través de la lectura de Breve Historia
del Budismo el lector se impregnará de esta cultura y su filosofía y
observará como este movimiento religioso ha influido profundamente en la vida
cotidiana de la sociedad oriental y en la configuración de muchos pueblos, como
por ejemplo el hindú. El leer esta obra no les llevará al nirvana ni al éxtasis
del conocimiento supremo, pero sí aprenderán la apasionante historia de Sidarta
y la gran sabiduría que aporta su sapiencia.