martes, 24 de julio de 2012

SÍMBOLOS PERDIDOS - Joel Levy


El misterio es la cosa más bonita que podemos experimentar. Es la fuente de todo arte y ciencia verdaderos. Albert Einstein

Siempre he dicho que la Historia tiene dos caras como una moneda. Una de oro brillante en la que aparecen los datos puros y duros, constatados y pormenorizados en donde no hay duda de fechas y épocas. Y luego hay otra cara no tan brillante, oscurecida por la duda y la superstición, la intriga y el misterio más profundo. Ambas faces de la misma moneda se complementan una a otra. No es posible desunir esa conjunción de veracidad y leyenda, pues siempre que se pregunte por un hecho claro, detrás aparecerá continuamente otra pregunta que haga dudar de la primera, y luego otra y otra, y así hasta el infinito. Detrás de todos esos huecos que van quedando en la Historia Oficial esperan agazapados los misterios más profundos de la humanidad. No es posible, por ejemplo, conocer la historia de las Cruzadas sin las leyendas de la Santa Cruz, o el Descubrimiento de America sin las grandes incógnitas que rodeaban el Mar Tenebroso, o si Colon ya conocía las rutas al maravilloso y fabuloso Cipango… y así sucesivamente… ad infinitum.
           
Pues este libro que tengo el honor de reseñarles trata este asunto, Símbolos perdidos de Joel Levy. De misterios y falsos conocimientos que han recorrido la Historia Oficial a lo largo de milenios. Pero antes de seguir hablando del tema en cuestión es preciso que les ponga en conocimiento del autor de tan interesante libro: Joel Levy (1971) es curiosamente autor de éxito de un montón de libros de no ficción en el Reino Unido, como por ejemplo KISS Guide to the Unexplained, The little book of conspiracies, Boost your brain power, o por ejemplo Fabulous creatures, entre otros. Esta licenciado en Ciencias Biológicas y tiene un master en Psicología. Actualmente combina su faceta de escritor con la de editor. Finalmente les diré que aquí en España se ha dado a conocer gracias  a la editorial Martínez Roca con libros como Todo lo que te han contado es falso, y El día del juicio final.
           
Viendo el curriculum del autor que hoy les reseño, no es de extrañar que más de uno esboce una pequeña mueca de incredulidad y curioso desprecio. Pero no se extrañen, ni tengan reparo en pensar que nos encontramos con un autor que se aleja totalmente de la órbita del tema que tratamos en esta bendita casa de Hislibris. Tampoco se extrañen ni se cohíban en discurrir que el autor es uno más de los pseudo científicos-literarios en plan New Age o Dan Brown que nos va a descubrir y revelar los más insondables secretos de la Historia y que nos dirá que todo es una conspiración mundial desde el mismísimo Ramsés II hasta el propio Obama. Y en verdad les insisto que en un principio no se avergüencen en tener esos pensamientos… por que yo los tuve al comienzo de la lectura y adquisición del libro, pero luego caí en el error, al leer página tras páginas pues habia cometido el error de menospreciar el libro prejuzgándolo a priori.


Les matizo mi impresión inicial. Cojan el libro y vean la portada en plan efectista con su Grial en la portada y su puntiagudo Faro de Alejandría en el centro y rodeado de nieblas. A esto añádanle el curriculum anteriormente citado. Y finalmente sazónenlo con una pizca de conocimiento que todos tenemos con respecto a la avalancha de pseudo libros de Historia. Libros que han causado más daño que todo un ejército de espartanos entre las filas persas. Pero esa sensación inicial se disipa al leer el comienzo del libro.  Este autor, bastante novel con respecto a los libros coherentes, es muy inteligente al mostrarnos todos estos asuntos tan oscuros con una nueva óptica. No se limita esencialmente a presentarnos los símbolos, misterios, lugares perdidos en el tiempo, o fabulosos tesoros, etc.… como verdades prioritarias de la Historia. No las fabula ni les pone un sello de fe verdadera, sino que arroja sobre ellas la luz de la verdadera Historia, equilibrando cada error en que puede caer la leyenda con el peso de los datos contrastados de eminentes historiadores. Joel Levy como una auténtica máquina de destrucción machaca todo vestigio de superstición y muestra los hechos desmintiendo las perniciosas y enrevesadas telarañas que han oscurecido a la Historia Oficial. Primeramente en cada episodio nos enseña y muestra la leyenda tal y como se conoce, con sus variantes diversas y luego pasa a mostrarnos dato a dato lo poco que tenga de veracidad esa historia y lo mucho que tiene de falso.

Aun así el autor, a pesar de desbrozar el espeso bosque de la pseudo historia, también da al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios. Joel Levy, sabiendo que la Historia sin la leyenda es como un banco al que le falta una pata, no menosprecia tampoco la patina mistérica a los asuntos históricos y la considera en ciertos momentos como motor de la Historia propia. Como ejemplo de ello pone, por citar algún caso, la búsqueda del Dorado, que permitio las “entradas” y descubrimientos de muchos exploradores a través de las frondosas selvas sudamericanas (recuérdese que Orellana buscaba el Dorado y acabó navegando por el Amazonas); o igualmente la búsqueda de la mítica Troya por Heinrich Schliemann. Las llamas de las leyendas muchas veces impregnaron la imaginación del ser humano, y esa fiebre produjo grandes avances, o grandes horrores, en la Historia de la humanidad. La búsqueda del imposible condujo para bien o para mal al hallazgo de lo posible.


Por tanto, al culminar esta humilde reseña, les animo que se acerquen  a este curioso libro Símbolos Perdidos, escrito por Joel Levy y editado por Martinez Roca (2010) y sin ningún temor a verse salpicados de tanta basura pseudo histórica, paséense por algunos de los misterios insondables de la humanidad. No duden ni tengan temor en sumergirse en la claras aguas de la Atlántida, coger un libro de la mítica biblioteca de Alejandría, o compartir entre sorbo a sorbo la sabiduría del Santo Grial… pues les acompaña un sabio consejero, que les analizará sin coste alguno cada misterio y cada acertijo que se esconda en las tinieblas más ancestrales de la Historia.