martes, 9 de julio de 2013

¿CON O SIN BARRO?



Al igual que el Guernica de Picasso representa los horrores de la guerra, Duelo a Garrotazos de Goya se ha convertido en todo un símbolo de las guerras civiles que han desangrado nuestro país. Allí en el cuadro los podemos ver, hermano contra hermano blandiendo una estaca para destrozarse mutuamente, enterrados y decididos a matarse sin razón alguna. Pues bien este lienzo recibe al día cientos de visitas y casi todo el mundo ve en esta escena a un par de hombres sumergidos en el fango en una especie de lucha tribal sin saber que originalmente Goya los pinto al completo, sin estar hundidos en el barro. Entonces ¿por qué están así? En 1874 el barón d´Erlanger era el dueño de la Quinta del Sordo donde se encontraba esta obra en uno de sus muros. Con el paso del tiempo esta pintura mural se había ido deteriorando poco a poco por lo que el barón encargó a Salvador Martínez Cubells, entonces restaurador del Prado, que la trasladara a un lienzo y que a la vez lo restaurara. Pero en el proceso Duelo a Garrotazos sufrió una serie de alteraciones importantes siendo la más importante que Salvador Martínez Cubells, sin saberse un motivo claro, decidió cubrir las piernas de los dos luchadores con una gruesa capa de pintura oscura que simulaba el sucio barro de la ignorancia.