jueves, 12 de septiembre de 2013

ELEMENTOS MADE IN SPAIN



También los científicos españoles han contribuido ha llenar de símbolos la Tabla Periódica de elementos. Algunas de las letras que aparecen en algunos cuadraditos tienen ascendente hispano. Por orden cronológico serían las siguientes:

En 1748, el químico Antonio de Ulloa descubrió en una expedición a las minas de Colombia y Perú un material blanco grisáceo, algo pesado, maleable a la vez que dúctil que por el parecido que tenía con la plata lo llamó Platino (Pt). Actualmente se utiliza en joyería, equipamiento de laboratorio, empastes y sobre todo catalizadores de automóviles.

Nos hemos de remontar de nuevo al siglo XVIII, a 1783, cuando dos hermanos de Logroño, Fausto y Juan José Elhuyar descubrieron un material muy escaso en la corteza terrestre: el Wolframio (W). Este material gris, duro y denso tuvo una importancia fundamental durante la Segunda Guerra Mundial, ya que muchas de las armas que se fabricaban tenían a este elemento como base fundamental. A pesar de ello, existieron algunos libros científicos que opinaban en cambio que el descubrimiento del wolframio se debía al profesor Scheele, aunque pasado un tiempo él mismo envió una carta a los hermanos Elhuyar diciéndoles que ellos eran los verdaderos descubridores de este elemento.

Y finalmente en el siglo XIX, Andrés Manuel del Río también quiso poner una pica en la tabla periódica. Al principio el quiso llamarlo Eritronio, pero como buen español al que le gustan las suecas se decanto por una diosa escandinava, Vanadis, llamando finalmente a su descubrimiento como Vanadio. Aunque al principio la comunidad científica internacional no le reconoció el hallazgo (cómo no) por considerar al vanadio como una versión impura del cromo, actualmente ha conseguido entrar en la lista de elementos oficiales, precisamente con el numero químico 23 y la sigla V…. de vendetta.