Cuando vemos
alguna sesión de las Cortes, una de las cosas que más nos llama la atención es precisamente
el color de los bancos en los que se sientan los diputados (de color rojo) y el
gobierno de turno, (de color azul). Como curiosidad indicarles que este invento
de los bancos de colores es algo reciente, y que hace, por lo menos, dos siglos
esta distinción no existía. Cuando se celebraron las Cortes de Cádiz en las
sedes del Teatro Cómico de la Isla de León y en la iglesia gaditana de San
Felipe Neri no existían bancos especiales para el gobierno. Al acabar la Guerra
de Independencia las Cortes se trasladaron a Madrid primero al convento de Doña
María de Aragón y posteriormente al del Espíritu Santo y todavía entonces los
bancos gubernamentales no se distinguían por su color sino por la situación en
que estaban colocados. Finalmente lo del banco azul para el gobierno y el rojo
para los demás diputados aparece al inaugurarse en 1850 las actuales Cortes en
el Palacio de la Carrera de San Jerónimo.