jueves, 13 de noviembre de 2014

EL SALVADOR DEL MUNDIAL DE FÚTBOL



¡Para que algunos digan que los animales no tienen nada que ver con el deporte! Pues bien hay que aclarar que gracias a uno de ellos se pudo celebrar la Copa del Mundo de Fútbol de 1966 en Inglaterra. Les comento: unos meses antes de que se produjera este evento deportivo la Confederación Brasileña de Fútbol, como acostumbra hacer el ganador de la edición anterior, devolvió el trofeo Jules Rimet (antes de 1974 se llamaba así) a la FIFA para que lo guardara hasta la final. Mientras tanto estuvo de gira por Londres siendo exhibida en el Westminster Central Hall de esa ciudad. Pero el 20 de Marzo por la tarde la BBC comunicó que el trofeo, valorado en unas 300.000 libras, había sido robado durante el oficio religioso y que los agentes de Scotland Yard ya se encontraban tras la pista de un sospechoso.

La Federación Inglesa de Fútbol rápidamente se puso manos a la obra para fabricar una réplica de la copa Jules Rimet, por si no aparecía. Pero no hizo falta ya que siete días más tarde, el 27, un hombre llamado David Corbett, estaba paseando con su perro Pickles por el barrio londinense de South Norwood cuando éste se puso nervioso a escarbar en un seto. Cuando David se acercó a su mascota vio que había desenterrado un papel de periódico y que envuelto en él se hallaba la codiciada copa. De inmediato la recogió del suelo y fue corriendo a una oficina de la policía. Tiempo después declaró lo siguiente:

Al principio creí que era una bomba. Había mucha actividad del IRA en aquella época. Empecé a desenvolver el objeto pero nada se movió. Entonces vi que ponía ‘Brasil’, ‘Alemania’, etcétera y fui corriendo a avisar a mi mujer. Me pareció pequeña.

Hay que precisar que la Jules Rimet mide alrededor de 35 centímetros y pesa 38 kilogramos. Pero continuemos con la historia. Aquel descubrimiento hecho por un perro inglés hizo pensar a muchos que era un buen augurio para el equipo nacional. ¡Y tanto que lo fue pues ese año ganaron el Campeonato! Como premio por tan increíble hazaña Pickles recibió como recompensa comida para todo un año y su dueño un cheque valorado en 6000 libras. Incluso protagonizó película. Aun así, a pesar de ello, la alegría le duró poco al perro ya que un año después Pickles murió ahogado cuando perseguía a un gato. Parece ser que se le enganchó la correa en las ramas de un árbol caído.

Y por cierto… ¿que fue del autor del robo de la copa? El causante de todo este embrollo fue un exmilitar llamado Edward Bletchley el cual quería extorsionar al presidente de la Federación Inglesa pidiéndole un total de 15000 libras esterlinas. Fue condenado a dos años de prisión, y murió al poco de salir libre debido a un enfisema.