jueves, 1 de enero de 2015

LAS MEJORES VISTAS DEL MEDITERRÁNEO



En 1542 el emperador Carlos I pensó tomarse un breve descanso  en la ciudad de Tarragona, precisamente en una casa señorial del siglo XV llamada Castellarnau. Un día que estaba algo menos estresado con sus obligaciones reales pensó dar una vuelta por la ciudad. Y cuando llegó al mar, quedó tan extasiado por el brillo de sus aguas que pronunció la siguiente frase: “Este es el mejor balcón abierto al mar que existe en mis estados”. El señor de uno de los mayores imperios de la historia, no sabía que desde ese momento se había convertido en el mejor publicista de Tarragona porque hoy todavía se puede ver esta frase como eslogan turístico de esta ciudad, además de haber dado nombre al mirador de la Rambla: El Balcón del Mediterráneo.