jueves, 26 de febrero de 2015

NOMBRES MALDITOS DE REYES



Una de las pocas personas que pueden presumir de haber reinado dos veces en España ha sido Felipe V. La primera vez que fue coronado como rey fue en 1700, y en 1724, debido a la imposibilidad de poder seguir siéndolo, abdicó en su hijo Luis, que se convertiría en el primer monarca español en ostentar este nombre: Luis I o Luis el Bienamado. Pero pocos meses después éste murió por culpa de una viruela perniciosa. En total reinó 229 días convirtiéndose de esta manera en el rey más efímero de nuestra historia. Debido a ello, y en contra de la opinión de su hijo Fernando que virtualmente era el nuevo Príncipe de Asturias, Felipe V volvió a ponerse la corona real. Desde entonces nadie con este nombre se ha proclamado rey, y muchos son los que opinan que es debido a la mala suerte que lleva consigo. Y por cierto, ¿sabías que en España existe otro nombre de rey maldito? En concreto se trata de Pelayo, el iniciador de la Reconquista. Según una tradición gótica quien se ponga el nombre del fundador de un reino no solo traerá la desgracia a sus vasallos sino que también lo conducirá a la ruina y la extinción. Llama la atención que durante la Edad Media ningún rey hispánico ha osado ponerse este nombre. Lo mismo ha sucedido durante las regencias de los Austrias y Borbones.