jueves, 30 de junio de 2016

BREVE HISTORIA DE LOS CELTAS - Manuel Velasco



Aunque el viento se lleve las palabras,
Las historias narradas llegarán a ser tan viejas
Como la luna errante. (William Yeats, 1889)

El cine como fábrica de ilusión. Me encantan las películas. Las devoro. Soy un auténtico cinéfago. Me encantan cualquier género, incluido el histórico. Es por eso que no hace mucho tiempo escuché a un buen amigo comentar si alguna vez había observado la diferencia entre películas ambientadas en Roma y su mundo, y las que tratan exclusivamente sobre los habitantes del norte de Europa, es decir celtas y nórdicos. Me dijo que la diferencia estribaba sobre todo en el tiempo y en el trato a las personas. En las que hablan sobre romanos casi siempre hace buen tiempo, pocas veces llueve y todo es soleado. Éstos son inteligentes, tenaces y emprendedores, mientras que en las de los “barbaros” ocurre todo lo contrario. Allí todo es gris, embarrado, y son brutos y sucios como ellos mismos. Y eso también se puede extrapolar a las que tratan sobre la antigüedad y las ambientadas en la Edad Media. Aquello me hizo pensar, y llegué a la conclusión de que tenía bastante razón, pero que no solo pasaba en el cine sino en cualquier otro género artístico como por ejemplo la literatura, ya fuera en forma de novela o de ensayo. Como consecuencia de ello, es normal que mucha gente desconozca verdaderamente como eran los habitantes del norte, y que piensen que eran meras bestias sin cultura alguna. Evidentemente no era así pues el pueblo celta, y sus ramificaciones por buena parte de Europa es una de las civilizaciones más ricas que existen. Poco a poco, en la actualidad, parece que las letras comienzan a valorarlos más y a descubrir lo fascinantes que eran. El libro Breve Historia de los Celtas, de Manuel Velasco es uno de esos ejemplares que reivindican la deslumbrante herencia de esta cultura permitiendo al lector bucear en una época que desgraciadamente ha sido muy castigada por la historiografía.

El autor se remonta a sus mismísimos orígenes míticos para enseñarnos como se fundó el pueblo celta y cuáles fueron las zonas de influencia que ocuparon en Europa. Desde la nebulosas tierras de Albión hasta incluso el oriente más enigmático. Rememora las gestas de sus valientes guerreros y caudillos, como la indómita Boudica, el persistente Vercingetorix o el propio héroe lusitano Viriato.  Pero no todo lo que ofrece Manuel Velasco en este ensayo son ejemplos de guerras sin cuartel, en donde las espadas bendecidas en sangre forjan las leyendas del mañana, sino que también hay espacio para mostrar el arte que impregnaba su día a día, las historias increíbles de sus dioses, o la forma en que este pueblo vivía, destacando su dedicación no solo a sus tierras, sino también a cualquier trabajo delicado. La forja, el ornamento, y la cultura literaria era algo que los celtas llevaban en sus venas. Las intrincadas formas, las sinuosas tallas en cruces pétreas y estelas dan un ejemplo del refinamiento de esta gente. Además este libro, Breve Historia de los Celtas se amplía con un tercer capítulo y un anexo que hace que el lector quiera conocer su increíble gesta no solo a través de sus hojas sino trascendiendo a lugares donde dejaron su impronta inmortal. Llama la atención como el autor nos deja esas coordenadas territoriales, sino que incluso se acerca a otros campos como la música, el cine, juegos, festivales celtas, e incluso sabe actualizarse al mundo moderno recomendándonos apps sobre celtas. Desde luego, un libro de lo más completo que verdaderamente va hacer las delicias de aquellos que quieran saber que la cultura de la antigüedad no solo era propiedad de griegos y romanos, sino que también si se mira un poco más al norte existió otro pueblo igual de extraordinario… los celtas.