Las enfermedades del alma son más peligrosas y numerosas que las del cuerpo (Cicerón)
Recuerdo que cuando era pequeño, uno de los mayores terrores (por lo menos para mí) era que a uno le acusaran de estar loco o de salirse de la norma establecida y destacar por encima de los demás no por lo bueno que eras física o mentalmente, sino al revés, por sobresalir debido a las excentricidades o conductas distintas que uno dejara traslucir y que se salieran de la uniformidad de la masa común. Incluso recuerdo una expresión que se decía acerca de que si estabas loco te podían ingresar en el Manicomio de Ciempozuelos (que a mis ojos ahora lo asoció con la gótica imagen del centro Arkham de los cómics de Batman). Pues bien, con el paso de los años, de bastantes años diría yo, la sociedad ha ido evolucionando y aquel tabú de la salud mental se ha ido relajando poco a poco, tanto que el interés por el cuidado de nuestro interior se ha normalizando y se afronta casi sin miedo alguno. Pero como pasa con todo, de la misma forma, dicha sociedad es pendular y por eso hemos pasado de arrinconar la salud mental y esconder de manera denigrante a las personas que tuvieran un trastorno a que todo gire en estos momentos alrededor de la salud mental. Obviamente es esencial cuidarla al igual que las demás partes de nuestro cuerpo, como un todo, pero lo hemos de hacer con criterio y con certezas médica, no de oídas, y para eso hemos de acudir a los médicos especializados en estos casos como son por ejemplo los psicólogos o psiquiatras, entre otros, o bien a material riguroso sobre este tema como es el que les muestro a continuación escrito por la psicóloga clínica Ana Martos titulado: La salud mental en 100 preguntas (Nowtilus, 2024)
Debido a ese movimiento pendular del que les hablaba anteriormente, hemos pasado del conocimiento cero al interés total trufado de falsas informaciones. Duele preguntárselo pero ahora que existe más información al respecto ¿está la salud mental de moda o no? Antes los estudios relacionados con el tema eran abordados por científicos que exponían sesudos estudios a los que normalmente el vulgo no podía llegar. Pero ahora con la explosión de internet y las redes sociales, las declaraciones de famosos variados contando sus experiencias, influencers de nueva ola, deportistas que se alejan de patrones tóxicos, y demás personas que llegan a todo el mundo a través de las pantallas, parece que existe una verdadera saturación de informaciones acerca de lo que es la salud mental y sus síntomas pero que por desgracia y debido al desconocimiento de esta gente o por no consultar a los expertos en la materia, muchas de estas declaraciones son erróneas o falsas provocando el desconcierto en las personas que los siguen o las leen y haciéndoles dudar a uno continuamente si tendré algún trastorno mental o vulgarmente si estoy loco de remate. Así pues, para ello, y para desbrozar el campo y eliminar de raíz cualquier duda les recomiendo que le echen un vistazo a esta guía de la salud mental y como hacían los antiguos peripatéticos interrogarnos a base de preguntas y respuestas y de un plumazo eliminar cualquier duda que tengamos y eliminar falsos conocimientos adquiridos a priori.
Si les soy sincero, anteriormente había leído algunos libros sobre la evolución en la Historia de todo lo relacionado con las enfermedades mentales y sus centros de atención, desde la antigüedad hasta la actualidad, y debido a esas lecturas anteriores había ido asimilando ciertos conceptos médicos que para sorpresa mía me han sido esclarecidos gracias a este trabajo de Ana Martos. Aquí nos devela cómo se abordan las enfermedades mentales en nuestro tiempo e igualmente como la tecnología actual y las redes sociales, por un lado, nos han beneficiado o, al revés, las han exacerbado de forma negativa ya sea debido a, como mencionaba antes, la aportación de ideas incorrectas, la ciberdependencia o la ludopatía entre otras. Así mismo analiza como el acelerado ritmo de vida y la exigencia a ella ha hecho sobresalir los trastornos de ansiedad y estrés, las conductas obsesivo-compulsivas, los trastornos alimenticios y sus correspondientes dolencias físicas, o la ausencia o exceso sexuales… y a todo este cóctel se le suma una verdadera dicción al respondernos dudas terminológicas acerca de temas mentales como, entre otras, qué son la psicosis y sus distintos tipos y derivaciones, las paranoias y todo lo relacionado con trastornos psicosomáticos y somato psíquicos, las depresiones o los temidos trastornos bipolares. Y así un gran número de dudas y consejos que van a ayudarnos a quitar el hierro de la paja y saber con verdadera certeza lo que es una enfermedad mental, los tipos que existen alrededor de ella, si es aplicable o no a nuestra persona y sobre todo alejar cualquier fantasma o tabú relacionado con nuestro interior el cual merece ser estudiado sin miedo alguno.
Ana Martos, La salud mental en 100 preguntas, Nowtilus, 2024, 351 páginas.