miércoles, 1 de enero de 2014

ANALIZANDO UNAS BIRRAS



¿Sabías que John Shakespeare, el padre del Bardo de Stratford-upon-Avon entre otros trabajos fue catador de cervezas? En aquella época, a las personas que ejercían esta labor se las conocía con el nombre de conners y se encargaban de ir por los diferentes pubs de los pueblos primeramente probando las cervezas que se vendían, después observando que el precio de venta impuesto por la Corona fuera el correcto y, sobre todo, finalmente comprobando que no estuvieran adulteradas con otros productos. ¿Cuál era el método que utilizaba John Shakespeare? Pues de una manera muy científica, como les contaré a continuación: Primero se acercaba a la barra y le decía al barman que le sirviera la mejor cerveza que tuviera, la más cara, que para eso paga el Estado. Cogía la pinta que le servían y derramaba la mitad en el taburete donde luego se sentaba. Tranquilamente se bebía la cerveza y pasado un tiempo se levantaba del asiento comprobando si la parte baja del pantalón, es decir, la parte del trasero, se quedaba pegada. Sí en verdad ocurría esto, es que la cerveza que le habían servido estaba adulterada con azúcar, haciendo que inmediatamente John Shakespeare expendiera la correspondiente multa al dueño del local.