jueves, 20 de febrero de 2014

DIABLURAS MUSICALES



Se puede considerar a Niccoló Paganini como el violinista más virtuoso de la historia de la música. Tanta era su habilidad que mucha gente pensaba que el diablo le ayudaba no solo a componer sus obras sino que incluso algunos creían haberle visto a su lado mientras tocaba durante los conciertos. La leyenda de las relaciones que Paganini y el diablo mantenían se enraizó tanto entre el vulgo que cuando el violinista murió en Niza en 1840, el obispo de la ciudad le negó la sepultura en la iglesia por lo que tuvo que ser enterrado en el cementerio del hospital de leprosos de Villefranche. Años más tarde su hijo exhumó el cuerpo y lo trasladó a Parma.