Existe una
creencia popular que asegura que en los Juegos Olímpicos de la antigua Grecia se
corría la prueba de maratón. Este dato es totalmente falso. Podríamos decir que
lo único que ha aportado la antigüedad a esta prueba es el nombre, es decir la
carrera que hizo un heraldo desde Maratón hasta Atenas para anunciar la
victoria de los griegos frente a los persas. En verdad la primera vez que se
corrió el maratón fue en Grecia pero en las primeras Olimpiadas Modernas de
1896 realizadas en Atenas. El ganador fue un griego llamado Spiridon Louis,
quien antes de la carrera estuvo orando y ayunando durante dos días. La
victoria de Spiridon fue toda una hazaña, y un honor para el pueblo griego el
cual no había ganado ninguna medalla durante aquella olimpiada. Hay que
recordar también que la distancia actual que se corre en un maratón es de 42.195
metros. Este recorrido fue fijado unos cuantos años después de la Olimpiada de
Atenas, precisamente en las de Londres de 1908. Parece ser que la
reina consorte del Reino Unido, Alejandra de Dinamarca, señaló que esta prueba
debía correrse entre el Castillo de Windsor y terminar frente al palco del
estadio White Hall. O sea 42.195 metros que es la distancia que existe entre
ambos lugares.