Entre el 25 y 26
de Junio de 1876, se produjo la famosa Batalla de Little Big Horn en donde las
fuerzas combinadas de varias tribus indias comandadas por Toro Sentado y
Caballo Loco masacraron casi en su totalidad al celebérrimo 7º de Caballería
del general George Armstrong Custer. Esta es la historia que todos conocemos,
pero pocos son los que saben que solamente uno de los caballos de las fuerzas
estadounidenses sobrevivió al desastre. Su nombre era Comanche, y desde el mismo momento en que fue encontrado corriendo
solo y desorientado por la pradera ya se le consideró todo un héroe nacional.
Durante un tiempo fue tratado a cuerpo de rey pero cuando murió se decidió que
su cuerpo fuera disecado con la intención de que fuera recordado por las
generaciones futuras. El encargado de hacerlo fue un taxidermista llamado Lewis
Dyche, de la Univerdidad de Kansas, el cual exigió por su trabajo un total de
450 dólares de la época. Y mientras tanto realizaba tan delicado trabajo, sus órganos
fueron enterrados con honores de Estado. Pasado un tiempo el cuerpo disecado de
Comanche fue exhibido en la Columbian
Expositión de Chicago (1893) y finalmente trasladado al Museo de Historia
Natural de la misma Universidad de Kansas, donde a día de hoy todavía lo
podemos visitar.