Si uno acude a
Inglaterra una de las primeras cosas que más le llamará la atención es que se
conduce por la izquierda. ¿De dónde les viene esta costumbre? Parece ser que
todo empezó en la Edad Media, cuando existía una fuerte división de clases y
estamentos. Las leyes de la época decretaban que la gente de alta alcurnia,
como por ejemplo reyes y nobles transitaran por la izquierda mientras que el
pueblo bajo se tenía que conformar con ir por la derecha. Pasado un tiempo,
cuando los medios de transporte se modernizaron se siguió manteniendo esta
costumbre pero no por cuestiones sociales sino debido a cuestiones prácticas ya
que los conductores de los carromatos sostenían el látigo o fusta con la mano
derecha mientras sostenían las riendas con la izquierda. Llama la atención que
los defensores de este sistema opinan que si estos conductores hubieran
circulado al revés no harían otra cosa que dar latigazos a los transeúntes. A
comienzos del siglo XIX durante las guerras napoleónicas el emperador francés
creyó que la conducción por la izquierda era un atraso por lo que abolió esta práctica
en todos los países o estados que había conquistado, pero como no llegó a poner
un pie en las Islas Británicas este sistema siguió allí perpetuándose hasta hoy
en día.